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miércoles, 28 de febrero de 2018

TALLERES DE CAPACITACIÓN LABORAL



Talleres de tatuajes con henna para mujeres
En noviembre de 2017, el área de mujer viajó al valle para dar continuidad al proyecto del área e iniciar los talleres de capacitación laboral. Suponen una respuesta a una demanda que desde hace tiempo tenían las mujeres de la aldea de Ifoulou y Azarzem y una posibilidad de trabajar aspectos como el trabajo en equipo, la perseverancia, la superación personal y grupal entre muchas otras competencias.
Además, formar parte de dichos talleres posibilita poner en práctica los conocimientos que van adquiriendo en las clases de alfabetización, ya que el cálculo y la lectoescritura son básicas en dichos talleres.

Para ello, contamos con dos figuras imprescindibles que dan continuidad al proyecto en el valle, y son las coordinadoras de los talleres y las agentes de desarrollo local, en continua coordinación con aG para que los talleres funcionen correctamente y el trabajo se pueda llevar a cabo con unos mínimos de calidad.



                                             
Mujeres haciendo cuadernos de pinturas decorativas
Mujer haciendo bisutería artesanalEl Área de Mujer visitará de nuevo el Valle en Semana Santa para continuar con dichos talleres, trabajando con ellas la bisutería artesanal con hilos y pintura decorativa con henna en diferentes soportes, además de poder lucir los tatuajes de henna tan tradicionales en Marruecos y que las propias mujeres realizan con la ayuda de los diseños que ellas mismas van innovando en sus cuadernos destinados a tal fin.  












La mejor noticia, es que todas las personas que participen en el Campo de Cooperación y Turismo Solidario podrán vivir en primera persona el trabajo artesanal que conlleva y podrán ser los primerxs compradorxs de estos productos que estarán en venta gracias al trabajo y entusiasmo de las chicas durante todos estos meses.
Compra hecho a mano

lunes, 11 de julio de 2016

Pasión por las aulas, pasión por el valle...


 Parece mentira… pero si, ya hace más de tres meses que dejamos nuestro querido Valle. Un campo de cooperación muy especial, por la singularidad de cada uno de los participantes y porque para algunas de nosotras era el primero como miembros de Acción Geoda… 

Ya queda muy poco para volver, pues nos encontramos ahora dando las últimas pinceladas de la organización de la 
II Caravana de Educación que se realizará a mediados de julio, además, el curso ha terminado también en el Valle, y parece inevitable revisar mentalmente este año… la anterior caravana de educación, la elaboración de nuestro proyecto, las reuniones, los eventos, el ver cómo crece el proyecto de educación que con tantísima ilusión elaboramos… 
Son muchos los momentos que se aglutinan en nuestra memoria y la mayoría de ellos hacen inevitable que las lágrimas de emoción se apoderen de nosotras y nosotros (incluido Abdú, claro)… Pero si tenemos que elegir un momento de los vividos hasta ahora, ese seria del campo de cooperación, el momento en el que vimos materializado uno de los objetivos que preveíamos más complicados: La creación de una biblioteca y una ludoteca para los bebes, niños y jóvenes en las aldeas de Ifoulou y Azarzem… un espacio de ilusión que fue posible gracias a las aportaciones de los participantes en el campo y a la caravana BMW Motos que llegó como obra de magia desde Granada, en la noche de peor climatología que recordamos…

La emoción vuelve a nosotras ahora, al recordar esos momentos y al saber, que en pocos días volveremos a ver este espacio de juego y lectura… donde niños y jóvenes nos contarán la experiencia de estos meses. Gracias por colaborar y creer en nosotras…

                                                                           Equipo de Educación de A.G.



jueves, 3 de julio de 2014

El agua caliente cada vez más cerca de las casas de Ifoulou

Una nación no debe juzgarse por cómo trata a sus ciudadanos con mejor posición, sino por cómo trata a los que tienen poco o nada. Nelson Mandela

Los que vivimos aquí, en esta parte que llaman Primer Mundo, con tan solo girar la palanca del grifo hacia la derecha o la izquierda obtenemos agua potable a la temperatura deseada. La experiencia que compartí la pasada Semana Santa en el campo de trabajo que desarrolló aG en el Valle del Tessaout, en el seno de un espectacular escenario, el alto Atlas marroquí, me brindó la oportunidad de conocer de primera a mano el día a día de los habitantes de la zona, y pude tomar conciencia de cómo este sencillo gesto suponía allí un arduo trabajo. Lo que para nosotros es un cómodo ejercicio de apenas unos segundos, para las mujeres del valle se traducía en una tarea mucho más complicada y severa.  
Para conseguir agua las mujeres tenían que subir desde el río hasta sus casas con grandes y pesados bidones de plástico a sus espaldas. Curvaban sus cuerpos formando un ángulo de prácticamente 90º y los sostenían tirando con una sola mano de una cuerda atada al envase. La velocidad con la que “trepaban” el valle, de barro, de piedra, totalmente irregular, con calzados muy deteriorados que dejaban sus pies al descubierto, era impactante. Para conseguir calentar esa agua habían de cargar, del mismo modo, troncos de leña con los que hacer fuego. En este caso no bajaban al río, sino que ascendían, de una forma aún más temeraria, por altos riscos de donde obtenían la leña. Me gustaría mostrar una imagen. No lo hago por respeto a las mujeres del valle. Ellas piden que no se las fotografíe, siguiendo la instrucción de sus maridos desde el momento en que se prometen. 
Fer, conocedor de este escenario, tiene una idea: elaborar un panel térmico-solar con el que calentar agua y colocarlo en el tejado de la casa de su gran amigo Abdullah. Abdullah es el promotor de salud de la aldea de Ifoulou y sabe que, si este piloto da buen resultado, él se encargará de explicárselo a los hombres del pueblo para que todas las casas puedan calentar agua.
Con este plan en mente, unas semanas antes del campo de trabajo, diseñamos la placa térmico-solar: buscamos vídeos y documentos en internet en los que se muestran experiencias similares; analizamos qué materiales pueden ser más eficaces, siempre teniendo en cuenta que han de ser asequibles y accesibles para la gente del valle; hacemos una cuantas cuentas y buscamos un termómetro con el que tomar medidas. 

Una vez en Demnate, compramos el material necesario y lo transportamos hasta el valle, y con ayuda de nuestras compañeras del campo de trabajo, a la casa de Abdullah, en Ifoulou.






Allí nos reciben su mujer, Fatma, y su hija mayor, Fahima, muy hospitalarias, como la gente del valle acostumbra a ser con sus visitas. Nos invitan a que nos sentemos en una salita en la que nos preparan té y nos ofrecen pastas.


Fahima, que nunca pierde la sonrisa, se muestra expectante. A juzgar por su cara de sorpresa, estoy segura de que se pregunta qué hemos ido a hacer a su casa. Con ayuda de nuestro amigo e intérprete Hafid, se lo explicamos. Vamos a intentar que su casa tenga agua caliente. De pronto, un brillo que habla por sí solo inunda sus ojos. Ella lo acompaña de una exclamación: “¿¿De verdad??”. Y yo siento un vuelquecito por dentro con el que termino de comprender el sentido de nuestra visita al valle. 


Más tarde nos acompañan, a través de una escalera muy angosta por la que a mí me cuesta subir pero por la que ellas suben con total destreza cargando leña a sus espaldas, al tejado de la primera planta. Allí comenzamos a trabajar en el panel térmico-solar. La vista es increíble. A nuestros pies tenemos el río Tessaout, y debemos tener cuidado de no poner un pie fuera del tejado y caer al vacío.

En primer lugar, medimos y cortamos las tablas de madera para formar la base y los laterales del panel, que unimos mediante clavos. Fahima y su hermano menor, Nordin, observan lo que hacemos. Fieles aprendices, nos ayudan por iniciativa propia. 








A continuación, con ayuda de Rosa, aplicamos cola en las uniones de las tablas, para evitar que el calor se escape,  
y pintamos toda la superficie de color negro, con objeto de facilitar la absorción de la energía. Una vez seca la pintura, grapamos un plástico en la base del panel para retener el calor en su interior lo máximo posible. Seguidamente, Lucía nos ayuda a colocar un tubo de PVC en forma de espiral dentro de la estructura, para lo cual hacemos orificios sobre la madera con un taladro e introducimos trozos de alambre que hacen de sujeción.

Por último, grapamos un plástico en forma de tapa en los laterales del panel, para provocar el efecto invernadero. Hubiera sido más eficaz colocar un cristal, pero este recurso es más costoso.  

Tras varios días en que compaginamos el trabajo en el panel con otras actividades, éste ya está terminado. Con ayuda de Jorge lo subimos al tejado de la segunda planta, donde introducimos agua en el tubo con una tetera.


Después de varias horas al sol, medimos la temperatura que éste alcanza. El resultado es positivo. Pero es necesario que llegue el agua a casa de Abdullah para poder comprobar que el líquido fluye a través del panel. Éste necesita conectarse a una fuente con cierta presión para que funcione 








A lo largo del campo, aG trabaja junto con los hombres del pueblo para que el agua del pozo de Ifoulou sea bombeada hasta el depósito situado en altura, y de allí a todo la aldea, apoyándose en un generador eléctrico que llevamos al valle desde Madrid. Este logro, que describo rápidamente, marcará un antes y un después en la aldea, ya que tras nuestra marcha, empezarán a introducir el agua en las casas, con el inminente beneficio en la salud de las mujeres de Ifoulou y mejora de la calidad de vida de todos sus habitantes. Las mujeres ya no tendrán que subir del río cargadas con agua a sus espaldas y todos los habitantes dispondrán de agua corriente en casa para su higiene.


El día en que finaliza el campo de trabajo y hemos de dejar Ifoulou, el agua todavía no ha llegado a las casas del pueblo. Así que, con ayuda de Abdu, miembro de aG que colabora desde Marruecos, explicamos a Abdullah lo que debe hacer para conectar el panel al grifo, cuando ya dispongan de agua en casa. En aquel momento, todos pensamos: “Ójala esto suceda pronto”…. hoy día, esto ya es una realidad, sucedió dos semanas después de nuestra vuelta a Madrid. 
La semana pasada Abdu llamó por teléfono a Abdullah y le preguntó  si el panel térmico estaba dando resultado. Éste contesto que el agua se calienta lo suficiente como para poder preparar té y darse una ducha. ¿¿De verdad?? 

Por un lado, no pude evitar emocionarme al conocer esto. Por otro, sabemos que las personas del valle son agradecidas, tanto como para darnos una noticia que mantenga nuestra ilusión viva. Hasta que alguno de nosotros pueda viajar al valle para comprobarlo, me ilusiono pensando que Fahima y sus hermanos ya pueden ducharse con agua caliente, y que ella ya no tiene que cargar leña a sus espaldas.  Si no es así, “Ójala esto suceda pronto”…

Sonia Pérez-Vázquez
Voluntaria de aG durante el campo de trabajo 2014 en el Valle  del Tessaout.



Nota: A día de hoy, el agua corriente llega ya a todas las casas de Ifoulou.
Nota: Esta semana o la próxima, un miembro de aG visitará el valle, y comprobará personalmente el funcionamiento de este experimiento solar de Agua Caliente.

lunes, 29 de julio de 2013

La educación en el Valle de Tessaout o nuestro granito de arena para cambiar el mundo


“Un niño, un maestro, un lápiz y un libro, pueden cambiar el mundo”
Malala Yusafzai, víctima de un atentado talibán en octubre del 2012 
por defender el derecho de las niñas a asistir a la escuela en su país.


Aicha, Ilham y sus otros 15 compañeros han acudido puntualmente todos los días de este curso a la modesta aula de preescolar en Azzarzan. Las ventanas no ajustan bien y, en ocasiones, pasan frío, aún asi apenas han faltado a sus clases y están contentos porque han aprendido lo sufuciente como para asistir cuando tengan 6 años mejor preparados que los niños que los antecedieron a la escuela oficial. Por su parte, sus mamás han ocupado la misma pequeña aula por las tardes en sus clases de alfaberización. En total, han sido 42 mujeres que divididas en dos grupos y, a pesar del duro trabajo diario que las esperaban todos los días, han acudido puntual y dirariamente a sus clases. Éste ha sido el primer curso escolar en Azzarzane que ha finalizado con gran éxito. Las ausencias han sido mínimas y los conocimientos aprendidos muchos gracias también a nuestra maestra Rekeya El Heddan.
Alumnas en la fiesta de fin de curso en Azzarzane

¡Y por fin han llegado las merecidas vacaciones escolares!. Para el próximo curso escolar, aG tiene un reto muy importante, buscar un lugar más grande y confortable para niños, mujeres y profesora en Azzarzane.


También a Ifoulou han llegado las vacaciones. Rachida Amazigh, la maestra, ha finalizado el cuarto curso desde que aG actúa en la zona, donde ha dado clase a más de 20 niños y a más de 20 mujeres. Aquí la educación preescolar está bastante estabilizada e institucionalizada y goza de una amplia aceptación por parte de la comunidad. En Ifoulou tenemos otro reto para el próximo curso, buscar una formación profesional para las mujeres. Una tarea que no es nada fácil porquer es bastante complicado localizar a profesionales que quieran desplazarse a esta zona que sufre unos inviernos duros y rigurosos.

Pero todo está cambiando en nuestro querido Valle de Tessout. La luz ya ha llegado y pronto hasta en Irabran e Ifoulou habrá agua en los hogares. Esto marcará un antes y un después porque mujeres y niñas dispondrán de tiempo para su formación y desarrollo personal. Además, de mejorar sus condiciones higiénicas y de salud, sus espaldas dejarán de cargar las pesadas garrafas de agua hasta sus casas. Ahora se nos abren nuevos objetivos para el proyecto de Educación y de Sanidad de aG; educación en el consumo responsable del agua y de educación para la salud (salud bucodental, higiene personal...).

Rekeya, la maestra de Azzarzane, con parte de sus alumnos
Y, la última noticia, hace muy poco, nuestro socio en Marruecos, Abdellatif Boussetta, nos mandaba las primeras imágenes de las obras de la construcción de la carretera a Ifoulou algo que será determinante para mejorar las condiciones de vida en la zona.

Como ya os contamos en su momento, el proyecto no hubiera sido posible sin la colaboración de Najib Bolua, de la asociación Tazouknit, nuestra contraparte local en el área de educación, allí en Marruecos.

Al curso que viene, seguiremos con la enseñanza de preescolar y de alfabetizacion de mujeres con alguna novedad: en Ifoulou extenderemos las clases por la tarde para los niños y avanzaremos en la construcción de un proyecto de Formación Profesional para las mujeres que ya han superado los niveles básicos de alfabetización. En Azzarzane esperamos comenzar y finalizar el segundo curso escolar con tanto éxito como el pasado.


Para todo ésto necesitamos la tan deseada financiación que tan escasa está en estos tiempos de crisis y que en la Fundación Acción Geoda, con sólo cuatro años de existencia, sacamos y buscamos hasta debajo de las piedras. Para ello tenemos abierta una fórmula en Teaming, en la que simplemente te pedidos que dones 1 € al mes para nuestro proyecto de Educación. No cuesta nada; ¡anímate!. Seguro que te lo puedes permitir, ¡es sólo 1 €!  ¡menos que un café!.

jueves, 10 de enero de 2013

Grandeza


Miro a través de la ventanilla y observo, según el avión va llegando a Marrakech, una cadena montañosa.  Esas imponentes montañas están, debido al color de nieve, tan blancas como la espina dorsal que sustenta nuestros cuerpos.  Agudizo la mirada a través de mis gafas graduadas, y me sorprende sentir la enormidad de esas moles pétreas entre los fértiles campos que las rodean.

Aterrizo, y como es otoño, al bajar del aparato las caricias del viento besan mi rostro tan suavemente como se posan las hojas de los árboles al caer de sus copas. Paso el control de pasaportes sin problemas, y al salir del aeropuerto, un mini taxi me lleva, entre el enloquecido tráfico de la ciudad, hasta la estación de autobuses. Allí compro un billete y me subo a uno abarrotado que me lleva hasta la ciudad de Demnate, la entrada al paraíso.

Nada más bajarme del autobús, comienzan las bienvenidas, los abrazos, las sonrisas y un leve olor a grandeza comienza a asentarse entre mis fosas nasales.

Según me subo a la baca de la furgoneta que penetra diariamente al valle, ese olor se vuelve más profundo y a la vez más suave. Y tras llegar a lo alto del collado, cuyo descenso me lleva hasta el proyecto de Ag, una sensación de intensa paz comienza a adueñarse de mi alma. Se hace de noche, y ya de lejos comienzo a atisbar en la oscuridad mi destino, mi misión, mi elección.

Llueve, hace frío y viento, y al llegar, unos seres diminutos comienzan a descender de las montañas para recibirme. Al principio parecen sombras salidas de las entrañas de la tierra. Son pequeños, están sucios, visten las mismas ropas desde hace años, sus zapatos son sandalias rotas sin calcetines, y sus rostros están llenos de mocos. Presto más atención, y al fijarme bien, me doy cuenta de que son niños. Aquellos que viven y hechizan con su magia, tratando de mitigar de esta forma las duras condiciones de vida en el valle.

Me bajo de la furgoneta, y poco a poco comienzan a rodearme silenciosamente. Sus enormes, oscuros y profundos ojos están muy abiertos, sus pieles se erizan por el viento congelado, y sus cabellos son negros y rizados por la falta de limpieza y por el frío. Al observarlos, el olor que sentí anteriormente se vuelve más agudo y más fresco. Y de repente…, se produce el milagro. 

En mitad de la oscuridad de la noche una luz refulgente y cegadora ilumina todo el valle. Miro hacia el cielo encapotado, que permanece tenebroso y amenazante, y veo que esa luz no viene del espacio. Cambio el foco de mi mirada, y al bajar la vista me doy cuenta de que la luz viene de esos niños, que a pesar del frío, de la pobreza, del sufrimiento y de la dureza de sus vidas siguen sonriendo. Y es entonces cuando finalmente me doy cuenta del significado de la grandeza…


Y es que esos niños, con su sola presencia limpian mi alma, iluminan mi espíritu, agudizan mis sentidos, traen paz a mi vida, y dan sentido a mi existencia.  Y en esto consiste para mí la grandeza. En tener el poder de transformar almas, de cambiar vidas, de traer luz y alegría con su sola existencia.  Por ello, cada vez que les miro y les siento, ocupan con su humilde esencia, hasta el último lugar de mi abotargada conciencia.   

Entrada escrita por Diego Herrero

miércoles, 7 de noviembre de 2012

¿Tendrá sentido que yo cambie? Mi experiencia en aG

Llevaba un tiempo interesada en el “mundo” de la Cooperación, tema que desde fuera me intimidaba bastante y al que automáticamente le seguía el pensamiento: ¿Tendrá la mínima importancia el que yo cambie?
Un buen día, leí unas palabras que alguien muy sabio escribió. Hablaba acerca de los colores que integran el muro del mundo, de sus negros, sus grises y de la responsabilidad que tenemos todos para hacer que esas tonalidades se vuelvan blancas e impolutas. Decía que si pintamos un pequeño trozo de blanco, ya habrá menos pared negra, y si entre todos pintamos el fragmento que nos corresponde, al final el negro dejará de existir.
Así fue como decidí que ya era hora de empezar a pintar mi trocito de muro.
Por cosas del azar o del destino fui a dar con “acción Geoda”. Las primeras personas con las que contacté fueron Diego y Elena, miembros del área de Sanidad, que me comunicaron la gran necesidad de un dentista en el valle. Total, que ya no tenía excusa. Viajé a Ifoulou por primera vez en el Campo de trabajo de Semana Santa de 2012. Fue mi primera toma de contacto. No es fácil, o por lo menos para mí no lo fue, ver una realidad tan distinta a la que estamos acostumbrados. Comprobar que, simplemente por haber nacido en un lugar o en otro, no tenemos los mismos derechos. ¿Acaso no somos todos personas iguales, con derecho a una vivienda, a una educación, a una sanidad, a una vida digna al fin y al cabo?
No todo fueron cosas grises, también pude comprobar y sentir la fuerza de la gente que allí habita, sus ganas de vivir. Su día a día es una lucha constante, ya que, como os habremos dicho en miles de ocasiones, sus condiciones de vida son bastante duras.
En este primer viaje descubrí a sus mujeres, unas auténticas heroínas para mí, y la principal fuente de energía del Valle. Y también, por supuesto, conocí a sus niños, que a la mínima oportunidad van a recogerte a la puerta del albergue para simplemente cogerte de la mano durante un rato, para bailar, cantar contigo, de paso a ver si cae algún caramelo que otro…
En fin, ¿cómo me podría quedar indiferente ante todo esto?
Con ayuda de mis compañeros, comenzamos a pasar consulta. Madre mía qué colas interminables de espera! Efectivamente, hacía mucha falta la ayuda de un dentista en el Valle.
IMG_7949Silvia tratando de sacar un diente que se resiste, en Azzarzam
Por otro lado, también hicimos talleres de prevención bucodental. Para mi gusto, una manera muy divertida y desenfadada de acercarte a ellos, ya que la consulta de un dentista no es que genere mucha confianza.
Aunque los cepillos de dientes acaben finalmente en su pelo, tenemos mucha fe en ver los resultados en sus bocas, porque sus sonrisas será entonces imposible mejorarlas!
Viendo la cantidad de trabajo que se acumulaba, me “vi obligada” a regresar a Ifoulou en la Caravana Médica que se llevó a cabo en Mayo de este año. Un equipo médico de primera, y yo, bajamos para pasar consulta durante una semana: médica y dentista. Una semana de muchísimo trabajo, pero cargada de anécdotas y buenos momentos.
_DSC2863Con Hafid y Ana, peleando con los duros dientes de Zahara
Ya me lo decía Juana (la médica de aG, y de la que he aprendido infinidad de cosas de todo): “Ten cuidado, que esto de la cooperación engancha”. Yo no sé si es eso, si es Ifoulou, o qué será, pero este último Septiembre he liado a mi colega de profesión, y amiga, Jimena para volver otra vez. Otra semana de mucho trabajo… y todo el que queda por hacer.
Espero poder regresar pronto, inshallah!!
En un principio, la elección de Acción Geoda fue una cosa del azar, pero tras mi pequeñas experiencias, ahora sí que sé por qué repito y repito con ellos:
aG es una organización muy pequeña, empezando a funcionar, pero esto también es un punto positivo; cualquiera puede adentrarse y ver cómo funciona una organización así, formar parte directa de ella y comprobar que todo es transparente.
El que su área de actuación esté en Marruecos, es una suerte, es un viaje relativamente barato y no resulta muy difícil organizarse para sacar unos días libres e irse a conocer directamente el Valle, conocer su trabajo de primera mano.
P5191059
Y, sobretodo, que todo su equipo siente verdadera pasión y amor por el Valle del Tessaout y sus gentes.
Otra cosa que pude comprobar a lo largo de estos tres viajes, es que la gente de allí necesita y quiere esta ayuda. Están contentos cada vez que los visitamos, contentos por lo que nuestra presencia conlleva, y porque nos consideran sus amigos, lo mismo que a la inversa. Porque todo esto, toda esta ayuda, por supuesto, no es unidireccional:
Por una parte, nosotros, intentamos mostrarles el camino para ver la vida un poquito más a largo plazo. Hablamos juntos de eso de “prevenir es mejor que curar”. Y ellos, por el contrario, nos recuerdan que tampoco debemos olvidarnos de vivir el presente, el día a día, el ahora y aquí.
A mí me parece un intercambio perfecto. Por lo tanto, y volviendo a mis pensamientos iniciales, me considero una afortunada al comprobar que todo esto sí tiene un sentido, !claro que es importante que alguien cambie!, porque este alguien contagiará a otro alguien y su entorno. TODOS aprendemos de TODOS, todos tenemos algo que aportar para que ese muro deje de ser negro.
Para mí, sencillamente, en eso consiste la Cooperación.
Silvia



Nota de los redactores del Blog: Silvia colabora con aG en el área de Sanidad. Aunque en este momento se encuentra comenzando un trabajo duro y maravilloso, con la Fundación Vicente Ferrer, en la India. Seguro que a su vuelta viene con mucho que compartir con nosotros… y si adelanta alguna foto o relato, ya os lo iremos contando. Pero aunque vuelva con más conocimientos, ya en los tres viajes que hemos realizado con ella al Valle nos ha enseñado la alegría de su carácter, lo fácil que es tratar con ella, lo rápido que se adapta a los cambios –y esto en Marruecos es algo muy bueno- y su gran capacidad de trabajo.
Como anécdota, que muestra la gran labor que ha hecho y la confianza que se ha ganado ya Silvia, contar que cada vez que está allí pasando consulta, a la hora de la comida las mujeres se “enfadan” porque se ausenta un rato… y nosotros siempre les decimos riendo: “Es que los dentistas tienen la dichosa costumbre de comer”

domingo, 28 de octubre de 2012

Ser voluntario

Un conocido mío que trabaja en Cooperación al Desarrollo me dijo no hace mucho tiempo que no estaba a favor de la existencia de ONG pequeñas formadas por voluntarios porque eran frágiles y no garantizaban la consecución de los proyectos en el tiempo. En aquel momento pensé que llevaba toda la razón. También pensé en la Fundación de la que formo parte, Acción Geoda, donde todos somos voluntarios.

Hace pocos días leí un artículo sobre cómo la crisis está afectando a nuestro sector, el de las ONGs. Las organizaciones más pequeñas desaparecen, las grandes despiden trabajadores, disminuyen las subvenciones públicas y las ayudas privadas…

Entonces pensé en las dos caras que puede tener esta moneda, la cara del Tercer Sector profesionalizado, que se está viendo gravemente debilitado por la situación actual, y la cara de los movimientos voluntarios, que en mi opinión siento menos los impactos de la crisis.

¿Por qué? Porque el trabajo de un voluntario no depende de una nómina, aporta su tiempo y su esfuerzo haya crisis o no la haya. Es evidente que para llevar a cabo proyectos de cooperación en el Valle del Tessaout (Atlas de Marruecos) se requiere financiación, pero también es cierto que a pesar de que no abunda el dinero, el trabajo nunca cesa. Ya sea la difusión y publicidad de los Proyectos de Desarrollo que tenemos en marcha, como la planificación de acciones futuras, la gestión de trámites con instituciones marroquíes o los intentos de colaboración con otras organizaciones.

Lo que hacen los voluntarios no depende de ningún condicionante externo. Por eso, ahora también pienso que nuestras acciones son libres, no tienen límites y permanecerán en el tiempo tanto como nuestras ganas de mejorar las condiciones de vida de las gentes de este Valle y de todo aquel que lo necesite.

sábado, 13 de octubre de 2012

Fiesta del Cordero (Aid al-Adha)


En estos días los musulmanes celebran la fiesta mayor de su calendario lunar. 
Conmemora aquella ocasión en la que el profeta Abraham -Ibrahim- ofreció a su hijo Ismael, el primogénito, en sacrificio como prueba de su amor por Dios; pero en el momento en que lo iba a sacrificar, recibió la orden divina de canjearlo por un cordero.

Normalmente se sacrifica un cordero en cada familia, y los que disponen de mayores recursos tienen la la obligación de ofrecer una parte de él a los pobres.
Días antes se percibe ya la emoción y en los mercados, la actividad crece, llenándose el ambiente con los ecos del regateo, todos quieren el mejor cordero... debe estar todo en perfecto estado.
El año pasado tuvimos el honor de participar y compartir esta fiesta con los habitantes del valle del Tessaout. Su generosidad y hospitalidad se pusieron una vez más de relieve. Fueron días de fiesta, de familia, de  conversaciones alrededor de la mesa, de rencuentro, de alegría y porque no decirlo, de aventura en las carreteras nevadas del Atlas. 
Después de la oración del Aid, los hombres acuden a sus casas para comenzar el sacrificio. Es un día importante, la gente viste sus mejores vestidos. Se percibe el nerviosismo entre los niños… los mayores intentan dejar a un lado el día a día, las discusiones, los problemas… 
Las familias se visitan y nosotros disfrutamos alrededor de las mesas de nuestros amigos del valle de agradable compañía, riquísimos pinchos de cordero a la brasa, pan, aceite, dulces y frutos secos, y ese rico té verde que simboliza la hospitalidad.Este año no he podido estar sentado a la mesa de mis amigos, pero recuerdo con cariño la fiesta y espero poder celebrarla con ellos muchos años. Inshallah!

Los miembros de la fundación os enviamos nuestros mejores deseos para estos días de fiesta.


miércoles, 3 de octubre de 2012

Comienza el curso en Ifoulou .... y, por primera vez en Azarzam

La Fundación Acción Geoda hace suyo el lema de la Unesco que dice: “la educación es el medio más eficaz de luchar contra la pobreza, mejorar la salud y el bienestar, generar crecimiento económico y fomentar la ciudadanía responsable.” Por ello, después de tres cursos escolares en Ifoulou, comenzamos una nueva fase de nuestro proyecto abriendo una modesta Aula de Preescolar para los niños de 3 a 6 años y otra de Alfabetización de Mujeres en Azarzam.

Escuela de Azarzam.
Las obras de acondicionamiento del Aula y de la habitación de la maestra ya han finalizado y, como nos han dicho nuestras amigas de la caravana médica, Juana y Silvia, ha quedado un sitio digno pero modesto: “La casita de Azarzam es de piedra:  según entras tiene a la izquierda la sala de los niños con dos ventanas en línea , para niños pequeños está bien. En frente dos escaleritas y se sube al baño. Si sigues por el pasillo este se ensancha y nos encontramos una encimera con un seno y un agujero en el techo como salida de humos y a la izquierda una habitación grande con dos ventanas  haciendo escuadra una en cada pared muy bonita y cerrando el pasillo una puerta que estaba cerrada y nos explicaron que era para hacer fuego en invierno y calentarse. Si se decora un poco puede quedar muy bonita porque la estructura de la casa ya lo es“.
Esta será la "modesta" aula de la escuela
a falta de una mano de pintura.

Precisamente ahora es el momento más idóneo, puesto que, este invierno ninguna mujer tendrá que acarrear garrafas de 30 litros de agua a sus espaldas porque, por fin, lo van a tener en sus hogares gracias a los avances en nuestro proyecto más importante, el del Agua. Tendrán más tiempo para dedicarlo a estudiar y aprender todo aquello que no han podido antes. El índice de analfabetismo en la población bereber de estas aldeas es muy alto y podemos decir que es total entre las mujeres. Además, ellas son el sector más débil porque sus maridos emigran durante el invierno a la ciudad en busca de trabajo y se quedan a solas con sus hijos durante el duro invierno del Alto Atlas al frente de su hogar. Se merecen una oportunidad y por eso queremos darle una formación básica en lengua árabe dialectal (marroquí) ya que su lengua materna es el tamazight, lo cual les hace ponerse en situación aún más marginal. También queremos que aprendan cálculo, higiene y legislación para la protección de mujeres y niños. En total serán cerca de 50 la mujeres que asistirán con edades de 12 hasta 57 años.

Además, y no es poco, empezamos a trabajar con el grupo de niños más pequeños, los de 3 a 6 años, que todavía no van a la escuela. Ellos son absolutamente fundamentales para el proyecto Tessaout porque son un importante factor de socialización y motor de desarrollo para el futuro de su sociedad. Queremos que vayan a la escuela oficial de primaria con una base sólida y que puedan aprovechar al máximo lo que allí les enseñen. Queremos que aprendan, además, normas de higiene y cuidado personal, y que sean los transmisores de esas conductas en su entorno. En suma, queremos que la Infancia tenga el protagonismo que le corresponde en una sociedad tan dura y abandonada.

Pero el problema es que estamos muy escasos de recursos financieros. Cómo sabéis ha habido un importante recorte en ayuda al desarrollo (un recorte acumulado del 73% desde 2009) y si ya era difícil para una ONG como la nuestra, con sólo 3 años de existencia, conseguir alguna ayuda ahora lo es más. Por eso, hemos tenido que recurrir a una nueva campaña de crowdfunding en Lánzanos (http://www.lanzanos.com/caja/proyecto/3107/), en la que necesitamos que entres y nos votes para poder lanzarla públicamente, y en Teaming (https://www.teaming.net/fundacionacciongeoda-proyectoeducacion),  En ésta última simplemente te pedidos que dones 1 € al mes para el aula de preescolar. Seguro que te lo puedes permitir, ¡es sólo 1 €!

Nuestro colaborador Najib con un grupo de alumnos de Ifoulou.
Por otra parte, en Ifoulou todo sigue un año más. Rachida, la maestra, continuará su labor con los niños de preescolar que ya la conocen. Este año la tenemos que mimar un poco más porque va a asumir, además, la dura tarea de continuar el proyecto de alfabetización de mujeres. Aquí, como ya llevamos tres años trabajando, se organizarán dos grupos: uno de alfabetización básica y otro, más avanzado, para todas aquellas que ya han acabado los cursos anteriores y que necesitan avanzar en cálculo matemático y financiero, árabe dialectal y algo de francés. En fin, queremos darles una base para que tengan capacidad para desarrollar su futuro, por ejemplo para montar cooperativas, si lo desean.

Para llevar a cabo todo ésto contamos con la inestimable colaboración de nuestro amigo Najib Boula, de la asociación Tazouknit -nuestra contraparte local en el área de educación, allí en Marruecos-, y que vela por la materialización del proyecto. Él es nuestra voz en el Valle y el que se pelea in situ porque todo esté en orden y que funcione correctamente. Nuestro agradecimiento por ello.
Os iremos contando los avances del curso y esperamos enseñaros muchas fotos.

martes, 25 de septiembre de 2012

3ª Caravana Médica en Ifoulou y Azarzam

Hola, como ya os contamos, en Mayo hicimos nuestra última caravana médica. Pero nos quedamos con trabajo pendiente.
Y de esta forma, hace un par de semanas, hemos organizado esta nueva caravana. Con atención médica general, dentista y oftalmológica.
Este es el relato que nos han enviado los tres miembros del área de sanidad que estuvieron, las dos doctoras: Juana y Silvia, y Reduan. Esperamos que os guste:

JUANA (área de Sanidad de la fundación):042El sábado 8 de septiembre un grupo de mujeres llegamos a la aldea de Ifoulou; una optometrista: Ana; dos odontólogas: Silvia y Jimena; y yo: Juana, médico. Acompañadas por Reduan (aG) y Najib (de la contraparte local) y además amigos que ejercieron como traductores.
Comenzamos como siempre que se emprende una acción, organizando el dispensario médico y creando un horario para poder realizar todas las actividades pensadas para las dos aldeas: Ifoulou y Azarzam.
El primer día lo planificamos para Ifoulou, por la mañana en una de las salas de la casa comunal Silvia y Jimena, ayudadas por Najib, instalaron sus “sillones”, no os podéis imaginar, un montón de personas haciendo cola esperando su atención.
En otra sala, el despacho médico y el salón óptico: Ana, Reduan y yo. Ana dedicada a hacer sus mediciones ópticas a aquellas personas a las que en acciones anteriores se les había detectado una agudeza visual alterada y personas que acudían por primera vez para ver si eran susceptibles, hechas las comprobaciones oportunas, de una solución óptica o quirúrgica.
Por la tarde en Ifoulou, organizamos los talleres, para mi una de las actividades más importantes ya que en ellos se trabaja la prevención y se dan consejos saludables.
Por un lado Silvia y Jimena, con los niños, organizaron el taller de salud bucodental, donde insistieron a través del juego en la importancia de una buena higiene dental y en la adquisición de una rutina. Se repartieron cepillos y se enseñaron a manejarlos de manera adecuada . Por otro lado y acompañada por el promotor de salud local (Abdulá), di a las mujeres el taller de prevención del bocio y cuidados de los bebes: técnicas de lavado nasal con solución salina, como se prepara esta solución, como se hace el suero hiposódico para prevenir diarreas y la importancia del vestido en invierno a los bebes, terminamos con una degustación de pescadito que potenciaba la prevención del bocio.
Los dos talleres fueron masivos y muy gratificantes.
El resto de los días tanto en Azarzam como en Ifoulou hicimos lo mismo, así que no os aburriremos.
Sucedió algo muy importante que quiero reseñar, el día 11, martes llegaron a Ifoulou, un grupo de personas, chicos y chicas, miembros de la asociación socio cultural La Isla: Adrián, Marta, Fran, Alba y Alicia que colaboran con el programa “Cambia la mirada“, y juntos diseñamos una actividad para realizar con los niños que reforzara todo lo aprendido en nuestros talleres mediante ocio educativo.
FOTOS IFOLOU 105El último día, recogida y despedida, dejándolo todo preparado para que el promotor de salud
pueda seguir realizando su actividad en el dispensario.
Y esto es lo que queremos trasmitir, que no existen acciones aisladas, sino que todas las
acciones se enmarcan en un continuo, donde la educación es el hilo conductor.
Besos,
Juana



SILVIA (área de Sanidad):

Hola compis,
De vuelta del valle ya en casita (mi otra casita), con esa mezcla agridulce de alegría y satisfacción porque la semana haya ido tan bien, y a la vez nostalgia por dejar allí todo eso que se vive en Ifoulou.
Resumiendo, la semana ha sido un “no parar, las consultas genial, mucha gente, pero me cada vez nos organizamos mejor y, con la ayuda de Jimena, hemos podido atender a más gente y más relajadamente, o dentro de lo que cabe.
En consulta médica os podéis imaginar, Juana a mil por hora como de costumbre y Ana que se apañaba a la perfección con el bereber! (Tamazight)
034Sobre todo en nombre de Jimena puedo decir que se ha quedado encantada con la experiencia y con ganas de repetir, así que para la próxima reunión de aG mantenedla informada porque puede que se una. Me jura y perjura que un día, tras el taller de prevención bucodental que hicimos, subiendo a la casa comunal vio de lejos a una niña lavarse los dientes a la puerta de casa... jeje yo no sé si creérmelo, pero tanto ella como yo seguimos con muchas ganas de continuar “dándoles caña” a esta gente durante los próximos años.
De la gente del valle os transmite muchos recuerdos, en especial de Abdulá y Alí, tan simpáticos como siempre. Hay unos cuantos peques "nuevos" que iréis conociendo en los próximos viajes, y los de siempre cada vez menos peques y cada vez más entrañables. Estos niños son todo amor!!
Agradecer también a nuestros amigos traductores su paciencia (cuatro mujeres pidiendo traducción instantánea a un mismo tiempo no debe ser tarea fácil) su ayuda y su compañía, nos lo hemos pasado muy bien y hemos aprendido mucho de ellos, como siempre.
Un besazo a todos, nos vemos muy pronto.
Silvia

REDUAN (área de Sanidad):

Hola chicos!! Qué tal estáis todos? Espero que todo vaya bien.
Yo ya de vuelta de Ifoulou. Estuvimos ayudando para la caravana medica… uuuffff!! mucha gente: tres días en Ifoulou y dos días en Azarzem.
Bueno todo va muy bien, la gente está muy contenta con nuestra ayuda y nos lo agradecen todos. No podéis imaginar la cantidad de los jóvenes que vienen a por los dientes; los niños y las mujeres que han venido a hacer consulta con Juana también.
Ana el tercer día estuvo un poco mal en Azarzem, pero después se le pasó y volvió a atender a la gente con problemas de vista.
FOTOS IFOLOU 118FOTOS IFOLOU 088Qué valientes son las chicas, muestras médicas!!!!
EDUCACION: En cuanto a la educación, hemos visitado la casa de Azerzem, los arreglos por lo general nos han convencido, solo hay que pintar mas unas partes del “baño” y pintar también el alfeizar de las ventanas. Y se lo hemos pedido.
También contaros que a mi vuelta, en Toufghin, he tenido una reunión con el nuevo director de las escuelas de la zona y me ha mostrado su interés en colaborar con nosotros para mejorar el nivel de los alumnos. También hemos vuelto a plantear lo de utilizar la Casa Comunal como espacio idóneo para dar clases en épocas de invierno, así se podrá garantizar la asistencia a clases en dichas épocas. y se evitara el intenso frio que interrumpe los estudios.... hay que ver como enfocarlo todo.
Hemos hecho un taller de educación para la salud con los niños y les hemos distribuido unos cepillos y dentífrico (a niños y mujeres).
AGUA: En lo que concierne el tema del agua fuimos a medir la coordenadas que necesitabais y se las hemos enviado a María. Dentro de una semana como máximo terminaran las obras del sistema de canalización, según el contratista. Ayer martes estaban cubriendo el techo del deposito.
Bsssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss a todos. Vuestro amigo Reduuuuuu


GRACIAS A TODAS LAS MÉDICAS QUE DE FORMA VOLUNTARIA HAN IDO A LA CARAVANA MÉDICA. PONIENDO SU TIEMPO, SUS VACACIONES Y SU DINERO PARA AYUDAR A LOS HABITANTES DEL VALLE DEL TESSAOUT!!!
OLYMPUS DIGITAL CAMERA         Nuestro equipazo médico, Reduan (de aG con su camiseta) y sus traductores.

jueves, 13 de septiembre de 2012

Por qué soy de aG, por Feli.

Conocí aG gracias al denostado Facebook. Lo típico, un amigo de una amiga, Diego, colgaba fotos preciosas de un valle y de unas gentes, los Tamazight, que me llamaban poderosamente la atención. Había visitado Marruecos en varias ocasiones, había subido al Toubkhal con mi hija de 13 años, por un valle con unos pueblos similares a los de los Belenes, con niños y niñas que salían a nuestro encuentro con una alegría y felicidad que ya los quisieran muchos de nuestros bien acomodados hijos.
Feli con Hafid, unos de nuestros traductores y amigos
Feli con Hafid, unos de nuestros traductores y amigos

El proyecto me atrajo desde el principio. Una ONG muy pequeña con todas sus ventajas e inconvenientes: te permite tener una visión global de todos los ámbitos de actuación, conoces a todos los miembros y a muchos socios, pero en cambio es más difícil conseguir fondos y el trabajo es mayor. Pero sin lugar a dudas, lo que más me sorprendió fue todo lo que en apenas dos años de existencia habían logrado.
Un día Diego me invitó a una de esas reuniones de los martes en donde conocí al alma de la Fundación: Fer, Yess, Elena, MariaJ, Chus, etc...
Hablaban apasionadamente de formas de conseguir euritos para el agua, algo tan cotidiano y accesible para nosotros. Hablaban de mujeres que se pasaban el día con niños a sus espaldas y que solo los soltaban para cargar leña y garrafas de agua. Hablaban de una casa comunal sin que yo supiera exactamente que era eso.
Me pidieron que firmará un proyecto para pedir una subvención en una fundación de mi empresa. Fue entonces cuando decidí pringarme y me hice socia.
Una operación de rodilla me mantuvo al margen por unos meses pero Facebook me permitió seguirles la pista y en verano regresé a las reuniones de los martes. Me propusieron, por aquello de que me gusta la montaña colaborar en una nueva área que se iba a montar, organizar viajes solidarios de montaña por el valle para desarrollo económico de la zona.
En el otoño tuve ocasión de hacer mi primer viaje al valle. Llegué de noche en un accidentado viaje con nieve, y sorteando las piedras que el agua había arrastrado ladera abajo en las tormentas tan frecuentes allí. Nada es fácil en el Atlas.
Me sorprendió la belleza de los pueblos y de sus valles, con su colorido otoñal, la hospitalidad de sus gentes y, sobre todo, la sencillez y calidez del trato que me ofrecieron. Compartí con ellos su fiesta grande, la del Cordero, similar a nuestras Navidades en donde todos los miembros de las familias regresan a sus pueblos para celebrarlo juntos.
Carecen de todo lo que para nosotros es básico: en sus casas no hay agua, no hay electricidad, no hay fuente de calor. Se nos ha olvidado la magia de abrir un grifo y tener agua hasta malgastarla. Tampoco puedo concebir un hogar sin hogar, esto es, una chimenea, estufa o similar máxime teniendo en cuenta que los inviernos allí son extremadamente duros; es alta montaña.
Nos abrieron sus modestas casas para tés, nueces y pinchos, todo un honor. A las chicas nos vistieron con lo mejor que tenían mientras a los chicos se les invitaba a la ceremonia de matar el cordero. Conocí a nuestros voluntariosos colaboradores en Marruecos: Al amigo Hafid, con su simpatía y generosidad, a Abdu con su amplia sonrisa, Simo nuestro guía y consejero en la montaña, Najib y su ayuda en el valle… y tantos otros.
Vista del Atlas Nevado, cerca de Ifoulou
Vista del Atlas Nevado, cerca de Ifoulou

Pero el viaje que realmente me dejo marcada y me obligó a hacer algo por esa gente fue el que hice a finales de enero. Yo tenía unos días de vacaciones y recibí una llamada de Juana, la médico que casi se había incorporado al mismo tiempo que yo en aG, para convencerme de ir las dos solas allí. Aquello fue una auténtica inmersión en el proyecto. Nos llevamos deberes de todas las áreas: Sanidad quería avanzar todo lo posible para la caravana que finalmente bajó en mayo. Educación quería que hiciéramos un seguimiento en persona de la evolución del proyecto, que habláramos con las profesoras… En fin, un lío.
Después de recalar un día en casa de la amabilísima familia de Reduan, otro de nuestros miembros en la zona, aparecimos en Ifoulou, con un tiempo que amenazaba cuando menos nieve, y nosotras con un utilitario de gama baja, una suerte, por otra parte, en Marruecos.
El paisaje no podía ser más bonito. Al fondo del valle y en las laderas de las montañas todo estaba nevado. El silencio solo era roto por el jolgorio y los gritos de los niños cuando fuimos a visitarlos a la Casa Comunal al comienzo de sus clases. Allí cerca de 30 niños se amontonaban en el aula de preescolar que aG tiene en la Casa Comunal. La mayoría de ellos acudía sin apenas haber desayunado y el frío era insoportable. Rachida, la maestra, nos comentaba que alguno de ellos llegaba a hacerse pis encima por no salir a la calle. Alguna de las niñas mayores llevaban encima a sus hermanos menores. Me sorprendió verles sin apenas ropa de abrigo y con la piel amoratada del frío.
El aula de preescolar en invierno. La imagen habla por si sola
El aula de preescolar en invierno. La imagen habla por si sola

Más tarde, en nuestro paseo por el pueblo, vimos mujeres cargando leña y lavando directamente la ropa en el río y con nieve en las orillas. Son mujeres que pasan todo el invierno solas en condiciones muy duras, con sus hijos pequeños; sus maridos e hijos mayores se van a Agadir a trabajar. ¡¡¡Son realmente valientes!!!
Mujeres cargando leña
Mujeres cargando leña.
Pesados fardos bajados desde la montaña, por empinados caminos de piedras, con rotas zapatillas de goma.
Yo personalmente solo recuerdo haber pasado ese frío cuando había hecho alta montaña en Pirineos o en el Valle del Kumbu, camino del campo base del Everest.
Tengo que decir que volví con el alma encogida y decidida a hacer algo por esta gente tan desfavorecida y abandonada por su gobierno a los que habitualmente llaman “bereberes”, palabra procedente del latín “barbarus” y que quiere decir bárbaro. Ellos prefieren que les llamemos Amazigh
Algunos me dicen que en España también hay situaciones límite pero lo de allí es endémico y necesitan que les echemos una mano. Están en crisis permanente. Aquí todo está más cercano: el agua, la luz, ¡¡hasta la educación!!.
Ya llevo casi un año colaborando activamente en aG. Actualmente estoy coordinando el área de Educación. Y, lo más importante, me siento parte de una gran familia aquí y allí, en el valle de Tessaout.
Te invito a que nos conozcas cualquier martes de éstos y a que colabores con nosotros. No te arrepentirás. También puedes hacerte socio o hacernos una donación porque ese pueblo lo merece (http://www.acciongeoda.org/images/docs/formulario_socios.pdf)

Feli.

NOTA: Si, como Feli, te quieres unir a aG, sólo tienes que escribirnos a info@acciongeoda.org y vemos como nos conocemos. Somos una organización compuesta en exclusiva por voluntarios que trabajamos juntos en un proyecto común, el desarrollo integral del valle del Tessaout.

NOTA: La electricidad, si todo va bien, llegará al valle en breve. Las obras están en marcha desde hace años, y parece que a no mucho tardar, será una realidad.

viernes, 6 de julio de 2012

Voluntarios: Marina Tarancón


Marina con Sahia en Ifoulou

Conocí aG por mi amiga Elena Hernando. Fue muy fácil convencerme para ir al campo de trabajo de 2010 en Ifoulou, estábamos tomando algo en una de mis visitas “relámpago” a Madrid, y me decidí casi al momento, no porque Elena sea muy persuasiva, sino porque transmitía tanta ilusión que despertó en mí toda la curiosidad por conocer el valle de Tessaoute y los proyectos de la Fundación.

Una vez allí, la verdad es que todo me sorprendió: el paisaje espectacular, las duras condiciones de vida, la cálida acogida de la gente, la sonrisa de los niños, el buen ambiente entre los voluntarios… Y desde luego que valió la pena aquel viaje.

Regresé al campo de trabajo de 2011 y de nuevo en julio de ese mismo año, esta vez invitando a una amiga de Oviedo, Alicia. 

Es difícil colaborar activamente en aG residiendo en Asturias, pero Alicia y yo queríamos aportar nuestro granito de arena desde aquí, así que hicimos una fiesta de presentación del Proyecto Tessaoute en Cambalache, la asociación donde participamos en Oviedo. La fiesta salió muy bien, fue un placer contar nuestra experiencia y difundir la labor de aG entre nuestros amigos asturianos, además de degustar platos típicos marroquíes al ritmo de “jawash”.

Después de mi breve experiencia como colaboradora en la Fundación puedo decir que lo que más me gusta de aG es que no se limita a realizar los proyectos sin más, sino que previamente se estudian las verdaderas necesidades de la población, se dialoga y consensúa con las asociaciones locales cuáles son las prioridades y, sobre todo, se anima a los representantes de los pueblos a reclamar lo que les corresponde por derecho: una buena educación; una asistencia sanitaria; un buen acceso a la ciudad y a los servicios básicos como el abastecimiento de agua o la electricidad; en definitiva, una vida más digna en el valle.  

Ya hace un año de mi último viaje a Ifoulou, y desde entonces tengo muchísimas ganas de volver, pero en enero de este año me embarqué en otro proyecto personal que por ahora me tiene muy ocupada: gestionar un albergue en la montaña asturiana junto con mi socio, Pedro. En cuanto llegué aquí pensé que había que hacer algún tipo de “hermanamiento” con el “Gîte d’etape” de Hanini.

Entre la gente de la zona que para por nuestro bar está Diego, un chaval muy implicado en el colectivo “Un orbayu nel desiertu” y, Pedro y él, mano a mano con las guitarras, empezaron a soñar con un festival en la plaza del albergue…Y lo que empezó como un sueño, tan sólo hace un par de meses, ahora es una realidad. La idea se fue perfilando hacia un festival solidario y, claro, yo no podía dejar de acordarme de Fahima, Abdullah, Hanini, Mohamed, Latifa, Salama, Abdel Hafid, Redouane, Abdellatif, Nachid, Samira, Leila… y tantos otros amigos tan lejanos y tan cercanos a la vez… así que me puse en contacto con la gente de aG en Madrid, e inmediatamente nos dieron su apoyo.

En el albergue El Alba, Soto de Agues, Asturias
Independientemente de la cantidad de personas que consigamos reunir el día de la fiesta y el dinero que recaudemos para los dos proyectos solidarios, yo considero ya todo un éxito sacar esta iniciativa adelante, y no deja de sorprenderme la capacidad de aG para movilizar gente con tan poco plazo de tiempo (al menos 20 personas vendrán desde Madrid). Daremos a conocer el Proyecto Tessaoute en Asturias, lo pasaremos bien y será una experiencia bonita. ¡¡¡Gracias!!!

Un fuerte abrazo para todos.

Marina

domingo, 6 de mayo de 2012

Ópticas Condal: Gracias por vuestra cooperación!


Gafas_entrega1
Lanzamos “ aGrégate!”, el blog de aG, de la mejor forma que podíamos hacerlo, agradeciendo la colaboración de Marcos de Ópticas Condal, en Noreña, Asturias por su cooperación generosa y desinteresada con la Fundación Acción Geoda.  

Para quienes no nos conozcáis y esta sea la primera vez que leáis algo sobre nosotros, os diremos que somos una pequeña ONG que trabaja en cooperación al desarrollo en el Valle del Tessaout, situado en la cordillera del Alto Atlas y que uno de nuestros proyectos está dedicado a la mejora de las condiciones sanitarias de esta bellísima zona de Marruecos. Precisamente aquí es donde cobra importancia la colaboración de Marcos.

Conocimos a Marcos a través de Iñaki, un amigo de Asturias, colaborador y viajero incansable; Elena, nuestra responsable de Sanidad y Marina, voluntaria de aG, hicieron el resto. Contactamos con Marcos y él nos suministro todo el material necesario para hacer los estudios iniciales de las deficiencias visuales con la intención de, en un futuro, poder proporcionar gafas graduadas a todas aquellas personas que lo requieran. En los Campos de Trabajo Solidarios de Semana Santa y junio de 2011 se hizo una primera medición a todos los niños, a las mujeres y a los hombres que lo solicitaron en las aldeas de Ifoulou y Azarzane, usando los optotipos – carteles rotulados con la letra imprenta "E" girada en distintas posiciones, el paciente sencillamente indica qué dirección señala cada "E"-  que Marcos nos había facilitado.

Muchas de las personas mayores de 40 años tienen la vista cansada y problemas para ver de cerca, lo que dificulta el desempeño de sus labores diarias, como coser o asistir a las clases de alfabetización, esa enfermedad o deterioro de la vista se llama presbicia.

Gafas_entrega2
De regreso en España enviamos a Marcos todas las mediciones que habíamos tomado con las que él trabajó y graduó las gafas necesarias para aquellas personas que identificamos con problemas para ver de cerca.  Los voluntarios de Acción Geoda hemos bajado en Semana Santa de 2012 a Marruecos a entregar éstas gafas, mejor que contarlo, mirad las fotografías de la entrega para que os hagáis una idea de lo que supuso ese momento.

El trabajo no ha hecho más que comenzar y aún tiene que bajar un oftalmólogo para realizar  la graduación de las gafas para la vista de lejos, pero este es sin lugar a dudas un gran comienzo.

Esperamos que os haya gustado nuestra primera crónica y si es así la podéis compartir, comentar o decirnos que os parece el proyecto.