Mostrando entradas con la etiqueta Fundación Acción Geoda. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Fundación Acción Geoda. Mostrar todas las entradas

miércoles, 28 de febrero de 2018

TALLERES DE CAPACITACIÓN LABORAL



Talleres de tatuajes con henna para mujeres
En noviembre de 2017, el área de mujer viajó al valle para dar continuidad al proyecto del área e iniciar los talleres de capacitación laboral. Suponen una respuesta a una demanda que desde hace tiempo tenían las mujeres de la aldea de Ifoulou y Azarzem y una posibilidad de trabajar aspectos como el trabajo en equipo, la perseverancia, la superación personal y grupal entre muchas otras competencias.
Además, formar parte de dichos talleres posibilita poner en práctica los conocimientos que van adquiriendo en las clases de alfabetización, ya que el cálculo y la lectoescritura son básicas en dichos talleres.

Para ello, contamos con dos figuras imprescindibles que dan continuidad al proyecto en el valle, y son las coordinadoras de los talleres y las agentes de desarrollo local, en continua coordinación con aG para que los talleres funcionen correctamente y el trabajo se pueda llevar a cabo con unos mínimos de calidad.



                                             
Mujeres haciendo cuadernos de pinturas decorativas
Mujer haciendo bisutería artesanalEl Área de Mujer visitará de nuevo el Valle en Semana Santa para continuar con dichos talleres, trabajando con ellas la bisutería artesanal con hilos y pintura decorativa con henna en diferentes soportes, además de poder lucir los tatuajes de henna tan tradicionales en Marruecos y que las propias mujeres realizan con la ayuda de los diseños que ellas mismas van innovando en sus cuadernos destinados a tal fin.  












La mejor noticia, es que todas las personas que participen en el Campo de Cooperación y Turismo Solidario podrán vivir en primera persona el trabajo artesanal que conlleva y podrán ser los primerxs compradorxs de estos productos que estarán en venta gracias al trabajo y entusiasmo de las chicas durante todos estos meses.
Compra hecho a mano

martes, 21 de noviembre de 2017

Te proponemos un reto: EDUCACIÓN PARA CAMBIAR LA VIDA

Entre la resaca de Black Friday y el Cyber Monday, llega el acontecimiento más solidario, el Giving Tuesday, o martes solidario, que tendrá lugar el próximo martes 28 de noviembre en su tercera edición en España.

PERO, ¿QUÉ ES GIVING TUESDAY?

#GivingTuesday es un movimiento global que quiere incentivar y multiplicar las buenas acciones de las personas. El objetivo es dedicar un día en todo el mundo a celebrar la acción de dar. Se busca movilizar a todos los ciudadanos, familias, organizaciones y empresas para que contribuyan en este día mundial de la donación, con el objetivo final de expandir la solidaridad los 365 días del año.

La iniciativa proviene de Nueva York, donde nace en el 2012 como alternativa a los días previos, conocidos como Black Friday y Cyber Monday, que promueven las compras antes de Navidad. En su primera edición, miles de organizaciones y personas se unieron para colaborar en acciones solidarias. A España llegó en el 2015, consiguiendo un total de 405.000€ destinados a más de 260 proyectos sociales, y 982 personas donaron sangre por primera vez. El movimiento tuvo una repercusión en medios muy elevada y consiguió ser trendic topic durante 5 horas.

FUNDACIÓN ACCIÓN GEODA TE PROPONE SU PROYECTO DE DONACIÓN

Aprovechando esta ola de generosidad y solidaridad Fundación Acción Geoda presenta su proyecto, EDUCACIÓN PARA CAMBIAR LA VIDA, para que nos ayudéis a inaugurar un nuevo espacio educativo y ludoteca para niños y niñas y para la alfabetización de mujeres en el Valle de Tessaout. Lo recaudado irá destinado a la construcción de dicho espacio, la dotación con el material mobiliario y didáctico necesario y para la formación y salario de una maestra.

El Proyecto Tessaout avanza día a día: Hemos pasado, en tan sólo 2 años, de trabajar de 3 aldeas a 25. Nuestros proyectos de Agua e Infraestructuras avanzan vertiginosamente y 12 aldeas tendrán ya agua en sus hogares a finales de este año. El de Sanidad en 2017 ha batido un récord con 3 caravanas desplazadas al valle.

Y el Proyecto de Educación tampoco se queda atrás. En el presente curso escolar disponemos de 9 aulas de infantil y alfabetización de mujeres en 7 aldeas con sus correspondientes 9 maestras. Pero continuamente recibimos peticiones para abrir nuevos espacios, nuevas aulas.

¿PORQUE NECESITAMOS TU AYUDA?

aG es una ONG muy modesta en la que todos somos voluntarios que trabajamos por y para los proyectos y para la gente del Valle del Tessaout. La financiación que recibimos procede de donaciones, fiestas, actividades diversas y concursos a los que nos presentamos. Apenas recibimos financiación pública, por lo que, habitualmente, hasta que no disponemos de la cantidad presupuestada para los proyectos, por ejemplo un pozo para cualquier pueblo, no los ejecutamos.

En el caso del Proyecto de Educación necesitamos un presupuesto anual fijo para mantener lo que hasta ahora tenemos y para poder clonarlo a otras aldeas del valle. Es por ésto que necesitamos tu ayuda.

Es tu pequeño grano de arena que puede hacer que la EDUCACIÓN EN EL VALLE llegue a más beneficiarios y podamos dibujar una gran sonrisa en sus caras. 

Y piensa, en el fondo, ¿qué son para ti 10€?. Allí,en Marruecos, en el Valle de Tessaout, muchísimo.

Entra y dona ya:
https://www.migranodearena.org/reto/17399/educacin-para-cambiar-la-vida

miércoles, 27 de septiembre de 2017

Impresiones de Conchi, una mujer con ceguera, en nuestro Viaje Solidario

Conchi Pontón nos acompañó en nuestro último Viaje Solidario en el valle 
y fue toda una lección de superación tanto para los que le acompañamos
 como para  las gentes de las aldeas del valle. 
Tiene una discapacidad visual completa pero eso no supuso
 ningún impedimento para disfrutar intensamente de todo.
Fue un modelo de inclusión social en todos los sentidos.





Conchi Pontón
Hace unos meses, un amigo me habló de la labor que realiza la Fundación Acción Geoda en Marruecos: de sus proyectos, de los Viajes de Turismo Solidario y de la experiencia que tuvo colaborando en la Caravana de Educación que se desplaza al valle todos los años. Me animó a conocerles y unirme a ellos. Reconozco que la idea me tentó y mucho, pero…. Sinceramente le daba vueltas y no se me ocurría que podría aportar yo allí y finalmente la idea pasó al subconsciente.
Por avatares de la vida y porque cada vez más creo que las cosas pasan por algo, mis planes de verano cambiaron y a pesar de todas las barreras que yo veía, el miedo a lo desconocido, al rechazo, a la falta de accesibilidad, la incomunicación que supondría interactuar con personas con las que mucha de la comunicación es gestual dada la diferencia de idioma, y casi sin pensarlo, me decidí a emprender viaje yo sola, porque lo necesitaba, sin saber muy bien si realmente aportaría algo a esas gentes o me lo aportarían ellos a mi.
Es difícil resumir en pocas líneas todas las sensaciones y emociones vividas durante esos 8 días allí a todos los niveles.
Lo primero que pensé, fue en una frase que me dijo mi amigo: “Son como una familia”. Ya en el mismo aeropuerto de Madrid, donde conocí a 4 de las 6 chicas que íbamos al viaje, hubo un buen feeling que se confirmó con la buena acogida en el aeropuerto de Marrakech de Marta y Feli por parte de la Fundación y mis miedos casi desaparecieron por completo.
Experimentando sensaciones en un día de trekking
Encontré tanto en Marta y Feli de aG, como en Almudena, Idoya, Ana, Paloma y Ángeles unas inmejorables compañeras de viaje: comprometidas, solidarias, desinteresadas, abiertas, dispuestas... Se me quedan cortos los adjetivos. Me sorprendió el hecho de que a pesar de no haber tenido trato alguno con personas con discapacidad, lo afrontaban todo con total naturalidad, sentido común y espontaneidad. Tan pronto estábamos bromeando en los primeros momentos cuando todavía no identificaba bien sus voces y las confundía, como con su justo apoyo y paciencia me hacían muy fácil acomodarme a los nuevos entornos y espacios que visitábamos.
Y que decir del Valle y sus gentes. Sencillamente que es un lugar que te atrapa nada más llegar y por supuesto que en él recibes mucho más de lo que das.
El cambio de entorno se va notando según te adentras y asciendes por las montañas y, en los caminos y carreteras, se cierran las curvas y se encrespan los terrenos haciendo más difícil transitar por ellos. El primer momento de emoción fue la entrada en el valle con el sonido de fondo de la canción África de Ismaël Lo.
Nos alojamos en la aldea de Ifoulou, en el albergue de Hanini, que nos estaba ya esperando con dos de sus hijos, Younnes y Omar. Abrazos, risas y apretones sin parar desde nuestra llegada. Una casa humilde, pero límpia y cómoda y con todas las facilidades al alcance para sentirnos cómodas y bienvenidas. Además del fabuloso enclave de la casa junto a un río, que te hacía sentir en paz y calma contigo misma, en mi recuerdo siempre estará su hospitalidad, su afecto y el maravilloso olor de esos riquísimos tajines y panes que nos preparaban a diario. De nuevo, me sorprendía como a pesar del desconocimiento y las limitaciones de comunicación, triunfó la naturalidad y las ganas de aprender e interactuar y todos me ayudaban a manejarme por la casa encantados. Incluso Omar, se unía a diario a nuestras excursiones y visitas y se batallaba el puesto de guía para mi!
Subidos en el techo de nuestra furgoneta
La gente del valle es alegre, afectuosa, amable y, sobre todo, muy hospitalaria. Sorprende ver que no tienen nada y te lo dan todo, las muestras continuas de gratitud que dan con cualquier mínimo detalle. Siempre dispuestos a abrirte sus casas tan humildes, sin luz, agua u otras comodidades. Tuvimos la oportunidad, por ejemplo, de compartir con algunas mujeres la experiencia de hacer pan en sus propias casas. Nos encantó porque normalmente la interacción suele ser con los hombres y los niños mientras que las mujeres suelen estar en sus casas. Fátima nos abrió su casa, nos enseñó la forma en que hacen el pan sin perder la sonrisa ni un momento a pesar del dolor de cabeza que parecía tener. Cuando estábamos degustando un té se percató de que no veía y, lejos de provocarle rechazo o cualquier otro sentimiento negativo, de forma totalmente natural empezó a dejarme tocar todo. Fue un momento muy bonito, en el que incluso sacó sus enseres de maquillaje y nos mostró cómo se pintan los ojos.
También tuvimos otro momento especial cuando se acercaron a la casa de Hanini a hacernos los famosos tatuajes de Henna. Nafisa, una chica de unos 15 ó 16 años, fue la encargada de tatuarme todas las manos con dibujos florales. Con ayuda de Hafid, el intérprete, nos contaban lo que hacían, incluso la otra chica que tatuaba nos contó su alegría porque se casaba en dos semanas y se marchaba a vivir a otra zona con la familia de su futuro marido al que no conocía. Lo bueno de este tipo de tatuajes es que al endurecerse la henna se palpa perfectamente el relieve del dibujo.
Conchi con nuestro amigo Hafid
Tampoco tengo palabras para Hafid, nuestro intérprete, que nos acompañó los días del valle. Fue mucho más que eso: volcado en enseñarnos todo, contarnos cosas de la cultura bereber, ayudarnos, amenizarnos las noches con su música y pendiente de todos los detalles y situaciones. Hafid dió clara muestra de que las barreras y prejuicios están en uno mismo, poniendo frente al desconocimiento de aspectos de guiado en montaña para ciegos con buena voluntad y ganas de aprender y vivir experiencias nuevas. Hizo de guía improvisado y me permitió disfrutar plenamente y con total seguridad y confianza de una ruta por las montañas del valle. Además de las descripciones detalladas que entre todos me iban haciendo de los paisajes, las montañas se sienten por si solas. A mi me encanta sentir el aire en la cara, respirarlo, escuchar los sonidos de agua, de los pájaros. Cuando hay viento el sonido que le da a la vegetación, incluso lo que más me gusta es escuchar ese silencio con pequeños sonidos. Me transmite calma y buena energía.
Quiso que disfrutáramos a tope del viaje y nos invitó a subir al techo de la furgoneta en la que visitábamos el valle y, por supuesto, tampoco vió limitaciones a que yo lo hiciera…. Ahí si que se notaba el aire... y los baches..., incluso alguna ramita en la cara!
¿Y porqué no vamos a saltar en uno de los sitios más bonitos ?
Durante los días que estuvimos allí, era fácil ver como a nuestra comitiva tanto a pie como en coche, se iban uniendo niños que aparecían de todos los lados. Pero sin duda uno de los momentos más especiales de esos días lo viví con los niños la tarde que llegamos a Ifoulou en la Casa Comunal donde estaban jugando y cantando. Da gusto ver con que poco son felices, sencillamente cantando y dando palmas o saltando de alegría porque Feli les llevaba alguna foto de viajes anteriores. En ocasiones los niños no entienden bien los motivos y se quedan algo parados de primeras, hasta que se dieron cuenta que no veía, pero su inocencia y naturalidad está por encima de todo…. Cuando nos íbamos todos los niños querían darme la mano y llevarme a casa. Fue un momento algo caótico, pero muy emotivo. Todos se quitaban las manos unos a otros para estar en primera fila y ser el que ayudara, robándole esta tarea incluso a mis compañeras de viaje.

Resumiendo, ha sido uno de los viajes más bonitos de mi vida y, sin duda, el más especial y que más me ha aportado. Fueron 8 días cargados de momentos, detalles, cariño, fraternidad, familiaridad y aprendizaje. Sin duda, uno piensa que va allí a dar y finalmente descubres que recibes mucho más de lo que das. Ver estas realidades y ver como la afrontan las personas que viven allí, te hace ver el mundo con otra mirada y con otra perspectiva nuestro acomodado mundo. Lo que tenemos y lo que valoramos y reflexionas sobre lo que verdaderamente es importante en la vida y priorizarlo. Sin duda, ésta es la mayor lección que me llevo de este viaje, además de la experiencia y vivencias y por supuesto de una buena amistad con gente maravillosa.

miércoles, 22 de marzo de 2017

22 de marzo, Día Internacional del Agua

No resulta extraño que en un sistema mundial que se perpetúa parcheando sus propias contradicciones sus habitantes se vean abocados al hecho de sobrevivir entre incoherencias, aceptando el absurdo y la paradoja como elementos inherentes a la propia existencia.

Hoy 22 de marzo, Día Mundial del Agua, celebramos que los organismos internacionales se impliquen activamente en la visibilización de un problema que afecta a buena parte de la población mundial. No es una cuestión baladí que la determinación y la audacia con la que lo afrontemos condicionará la vida de las generaciones presentes y futuras.

La escasez de agua potable y de saneamiento es la causa principal de enfermedades en el mundo. La mortandad en la población infantil es especialmente elevada. En los países en vías de desarrollo, más del 90% de las muertes por diarrea a causa de agua no potable y falta de higiene se producen en niños y niñas menores de cinco años. Unos 4.500 niños y niñas mueren a diario por carecer de agua potable y de instalaciones básicas de saneamiento.

Y la carencia de agua saneada afecta principalmente a las poblaciones pobres y rurales. Más de 850 millones de personas no tienen acceso suficiente a agua potable. El uso medio de agua por persona/día es de 200 a 300 litros en la mayoría de los países europeos, frente a los menos de 10 litros en los países en vías de desarrollo. Por término medio, las mujeres y niñas de los países en vías de desarrollo, caminan seis kilómetros al día transportando 20 litros de agua, lo que reduce el tiempo que podrían utilizar para otro trabajo productivo, o para que las niñas asistan a la escuela. Las enfermedades transmitidas por el agua elevan notablemente los índices de absentismo escolar entre los sectores de la población más desfavorecidos.

El 28 de julio de 2010, a través de la Resolución 64/292, la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoció explícitamente el derecho humano al agua y al saneamiento, reafirmando que un agua potable limpia y el saneamiento son esenciales para la realización de todos los derechos humanos.

El Objetivo de Desarrollo número 6 se basa en garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y el saneamiento para todos, incluye la meta de reducir a la mitad la proporción de agua dilapidada y aumentar su reciclaje.

Uno de los focos principales de actuación de la Fundación Acción Geoda, se basa en dotar de las infraestructuras necesarias para facilitar el acceso a un agua limpia y saneada a los pueblos del valle del Tessaout, en el Alto Atlas marroquí, fomentando a su vez  el fortalecimiento y el desarrollo de las instituciones comunales, que aseguren la viabilidad de los proyectos, implicando a los pueblos en la gestión de sus propios recursos.
Los habitantes de las aldeas trabajan en la construcción de zanjas y depósitos, instalan los contadores en las casas, y gestionan a través de las asociaciones locales, el pago de las cuotas que permiten la sostenibilidad del suministro y el mantenimiento de las infraestructuras. En algunas de dichas aldeas, ha sido necesaria la construcción de pozos para acceder a tan preciado recurso.

La cooperación entre Acción Geoda, las entidades colaboradoras que contribuyen posibilitando la financiación de los proyectos, y los propios habitantes del valle han permitido dotar de un fácil acceso a agua potable, a más de 3000 personas, incluyendo a los pueblos de Ifoulou, Irbran, Azzerzem, Taznakt y Toufghine.

Próximamente, otras 700 personas de las aldeas de Tiftich e Imi n Tizgui, mejorarán notablemente sus condiciones de vida, a través de las acciones que posibilitarán que tengan acceso a un agua potable y limpia, sin necesidad de realizar largos y pesados desplazamientos.

Uno de los objetivos de Acción Geoda, es seguir trabajando mano a mano con los habitantes del Tessaout, expandiendo el foco de actuación a nuevos pueblos del valle, y perseverando en una línea de cooperación, que asegure la viabilidad y sostenibilidad de la gestión local del acceso y suministro a un bien imprescindible para la realización de la propia vida.

Desde nuestra Fundación, también queremos señalar, que no es posible solucionar el problema del derecho humano al agua, si el sistema mundial no encara sus propias contradicciones. Celebramos que los organismos internacionales, consideren que  la carencia de agua potable es un problema central en el mundo actual. No obstante, la cuestión será irresoluble, mientras no repensemos las implicaciones inherentes a un sistema económico voraz, que en su continuo afán expansivo, ha puesto su foco en la mercantilización de un recurso imprescindible para la supervivencia.

El “oro azul” se ha convertido en una inversión financiera de alta rentabilidad. Su carácter finito y necesario, ha contribuido a que grandes multinacionales se estén centrando en monopolizar el suministro de agua en todo el mundo. El FMI y el Banco Mundial, instituciones que forman parte de las Naciones Unidas, han obligado a multitud de países, a privatizar el agua, como condición imprescindible para asegurar su financiación.
Peter Brabeck-Letmathe, presidente del grupo Nestlé, líder mundial de venta de agua embotellada, considera que: “ el agua no es un derecho, debería tener un valor de mercado y ser privatizada”.

El acceso y el suministro del agua ha constituido una histórica fuente de conflictos, en ocasiones enmascarados de cuestiones étnicas o políticas. Sin duda, no encarar con firmeza el problema del agua, generará conflictos y acentuará las desigualdades en tiempos cercanos.

Nos felicitamos por la celebración de este día, pero también remarcamos la incoherencia de no señalar cuestiones nucleares del problema.




martes, 1 de marzo de 2016

Nuestra lucha en el valle contra el bocio: Sal Yodada


El yodo es un mineral muy importante para nuestra salud puesto que es el encargado de la actividad hormonal del organismo, especialmente de la hormona tiroidea, que es la que interviene en el funcionamiento de la glándula tiroides. Así, el yodo se hace imprescindible para el crecimiento, el desarrollo y buen funcionamiento de nuestros órganos, la actividad del metabolismo, y, al mismo tiempo, para evitar problemas como el hipotiroidismo. Es un componente esencial de nuestra dieta.

¿Por qué es importante el yodo?


Porque es fundamental para el desarrollo de las hormonas en el organismo y su deficiencia en el embarazo puede ser el causante del retraso mental en los niños. La ausencia del yodo en la alimentación da lugar a enfermedades como el bocio (agrandamiento de la glándula tiroidea) hipotiroidismo (glándula tiroidea hipoactiva) y problemas en el embarazo (abortos, partos prematuros y anomalías congénitas en los bebés).
Si esta deficiencia de yodo es continua, los efectos secundarios pueden ser más o menos graves, como por ejemplo, piel seca, pérdida del cabello, fatiga extrema o reflejos lentos. Pero además, puede provocar obesidad y ésta conducir a problemas de diabetes.

¿Dónde podemos encontrar yodo?

En alimentos como en los productos lácteos (leche, yogurt, queso...), pescados (no de río) como el arenque, bacalao, sardinas…, huevos, lentejas y algunas frutas y verduras (naranja, espinaca, acelga, judía verde…), y, sobre todo, en la sal yodada. La ingesta de estos alimentos en la dieta diaria es fundamental
El tratamiento de la deficiencia de yodo, con la introducción de la sal yodada ayuda a reducir el número de casos en las zonas de alto riesgo.

Según el informe de UNICEF del Estado Mundial de la Infancia 2015, el consumo de sal yodada es de un 75% a nivel mundial, mientras que en Marruecos tan sólo es del 21% cifra que se incrementará considerablemente en las zonas montañosas y aisladas como en el caso del Valle de Tessaout.

La deficiencia del yodo constituye la principal causa de daño cerebral y de retraso mental a nivel mundial, a pesar de que es la más fácil de prevenir. Por esta razón, es muy importante tener en cuenta la necesidad de una alimentación equilibrada, que proporcione los nutrimentos requeridos para evitar este tipo de padecimientos.


Los niños son muy vulnerables a la deficiencia de yodo, generalmente se ven afectados por el bocio, el cual se incrementa con la edad y alcanza su máximo desarrollo durante la adolescencia. Esta enfermedad también es una manifestación típica en los adultos que carecen de este elemento, la cual afecta en mayor cantidad a las mujeres que a los hombres. A nuestras caravanas médicas se han acercado mujeres y niñas de pocos años con avanzados casos de bocio.

En Ifoulou y todo el valle del río Tessaout la población presenta muchos rasgos de hipotiroidismo. Al ser una zona de montaña y aislada, las campañas del gobierno sobre la utilización masiva de sal yodada todavía no han dado los frutos deseados y el consumo de sal se realiza sin estar esta enriquecida por este elemento.

¿Cuál es la línea de actuación de Acción Geoda?

El área de Sanidad, en cada una de las caravanas médicas que se han realizado en el valle, ha impartido talleres sobre la sal yodada y sobre cómo evitar el bocio. Se ha invitado a que se venda y compre sal yodada en el mercado de Ifoulou. Y también se ha enseñado a cocinar tajines con sardinas que aunque es un sabor no muy familiar les puede ayudar en una dieta más rica en yodo.

Acción Geoda, se ha propuesto que este consumo llegue al 100% de los hogares del valle, pues además de mejorar la salud de todos los habitantes es una garantía de desarrollo.


lunes, 29 de septiembre de 2014

¿Qué piensan los viajeros que han elegido aGtreK para conocer el Atlas y los proyectos de Acción Geoda?

Durante el mes de Julio, algunos clientes disfrutaron con aGtrek de unos días en el Atlas. Aquí os transmitimos algunas de sus opiniones…de cara al Otoño, una temporada perfecta para disfrutar de estas montañas.

La cariñosa opinión de María:

 Visitar el Valle ha sido una de las experiencias que más me ha cambiado. Maravillosa, divertida, diferente y sobre todo enriquecedora. Tanto la fundación como la gente del valle, nos acogieron y mimaron desde el primer momento, hasta el punto de hacerte sentir para de ellos. Un lugar mágico con gente increíble y que está haciendo una magnífica obra para que la vida de todos ellos sea más plena. Sólo tengo palabras de gratitud y enhorabuena para Acción Geoda por la gran labor que están haciendo, y en especial a Diego y Hafid por tratarnos como auténticas reinas! Volveré? Seguro que sí, Inshallah….

MARIA MARTINEZ ROMERO


La reflexión de Celia:




Pasados casi dos meses, reflexiono y escribo unas palabras que no pueden ser más que de agradecimiento, a mi querido amigo Diego, Hafid, Hanini, AG y a toda la maravillosa gente del valle que me hicieron vivir una de lasexperiencias más bonita y enriquecedora de mi vida.

Desde hace tiempo y tras muchas conversaciones con Diego, decidí visitar el valle del Tessaout, su gente y el trabajo que AG está llevando a cabo allí, maravilloso trabajo.

Recuerdo perfectamente casi cada momento del viaje, me impactó todo tanto que está grabado en mi memoria como si no hubiera pasado el tiempo, el paisaje, las paradas, la gente, los olores, sabores, colores, vuelvo a sentirlo.

Fueron unos días muy intensos, muchas emociones, mucho por ver, el tiempo transcurría despacio, intentamos aprovecharlo al máximo y sacarle partido. Cuando lo recuerdo y veo las fotos parece que hubiéramos estado un mes y fueron cinco días, increíble, los cinco días con más horas de mi vida.

La imagen, los niños, todos y cada uno de ellos.

Me alegra pensar en ese maravilloso trabajo que AG está realizando allí, cómo estáis mejorando las condiciones de vida, sobre todo de esos niños, que son el futuro.

Espero volver y pasar más tiempo allí y desde aquí, recomiendo vivir esta gran experiencia a todos.

CELIA MORENO


jueves, 7 de agosto de 2014

DE TREKKING.... SOLIDARIO

A la tercera siempre dicen que va la vencida, y en este caso a mí me pasó....Era mi tercer viaje a Marruecos, más concretamente al Valle del Tessaout, y esta vez sí que iba a ser, iba a patear por fin el Atlas!!!
 La primera vez fuí un poco expectante, no había viajado nunca a Marruecos y quería saber cómo era su terreno, sus costumbres, su gente y allí llegué con Jorge y con Hafid, al Valle del Tessaout, a Ifoulou... que lugar más guapo por favor!!!!
En ese momento me dije, Aran... no sé cuando va a ser, pero tú vas a andar por estos lares....
 La segunda vez fuimos de boda, también a Ifoulou, ahí hicimos un mini trekking, pues las lluvias habían inundado los caminos, y tuvimos que llegar andando al pueblo....

Y a la tercera fue, en el Campo de Trabajo 2014...

Yo lo tenía muy claro desde el principio, de los proyectos varios que se iban a realizar, yo participaría en todos los trekkings posibles, si, esto también era un proyecto, el de aGtrek...

aGtrek es un proyecto de viajes solidarios, desarrollado con la participación de los beneficiarios del ProyectoTessaout con el objetivo de impulsar su desarrollo.

Qué os voy a decir de los paisajes.... a veces no sabes si estás en un escenario de la “Guerra de las Galaxias”, de la “Vida de Brian” o si te vas a encontrar el portal de Belén.

No sabes si estás en Picos de Europa por las pedreras que encuentras, esos manchones verdes en mitad de una ladera seca son terrazas de cereal, verdes a más no poder, el contraste... hay que verlo, no es descriptible, y hablamos de entre 3.000 y 4.000 metros de altitud. Donde hay un chorro de agua, hay un hilo verde dando vida…

No sabes que es aquello que ves venir de frente, eso que abulta muchísimo y se va moviendo encima de un puntito de color, no lo sabes hasta que se acerca y te dice un “lebes” y ahí es cuando ves que es una mujer portando leña... Dios!!! que fuerza debe tener y  va con chanclas de plástico...

No sabes si la piedra del fondo es piedra, niño, cabra, cordero o que es... pero mola acercarte a descubrirlo, por el camino vas a encontrar todo esto... hasta en los sitios más remotos es complicado bajarse el pantalón... siempre hay alguien que estaba por allí....

No sabes a veces si el árbol que estás viendo en medio de un erial es enebro, sabina o que es.... el aire o las cabras…lo han dejado pelado, pero te permite trepar por sus ramas aún contenidas...

Es tanto el contraste de paisajes que hay que ir a verlo, esto no vale solo con leerlo...

Y cuando regresas de la pateada, ese té esperándote, esa merendola, esos churros al “estilo Hanini”, esos pankekes con nocilla y esas gentes dándote todo su calor...

Hay muchas formas de viajar, pero seguro que si lo hacemos de forma solidaria, disfrutaremos aún más.




Arantza del Moral/ Agosto´14

lunes, 7 de julio de 2014

aG en los premios Blas Infante

El Ayuntamiento de Casares destina parte del 0,7% de sus presupuestos anuales a iniciativas de cooperación que sirvan para paliar las desigualdades sociales a través de la convocatoria de los Premios Blas Infante Casares Solidario, una iniciativa solidaria que pretende ser un homenaje al más insigne de sus vecinos, el casareño Blas Infante, y a su pensamiento, que sentó las bases del Ideal Andaluz.

Este certamen se compone de tres premios denominados: Casares por Andalucía,Casares por España y Casares por la Humanidad (haciendo referencia a la sentencia del ilustre casareño: “Andalucía por sí, para España y la Humanidad”), que son adjudicados a proyectos de Organizaciones No Gubernamentales, los dos primeros a proyectos de Educación para el Desarrollo, y el último para Cooperación al Desarrollo; siendo el jurado el encargado de determinar la cuantía de los mismos en función del presupuesto de la iniciativa y el número de personas que se beneficien de la misma. 
La Fundación Acción Geoda ha recibido este fin de semana uno de estos premios, que será invertido en nuestro proyecto de suministro de agua potable.
Estamos felices y muy agradecidos, porque este premio constituye la posibilidad de seguir extendiendo este proyecto a un número mayor de beneficiarios en el valle.
Gracias a todos los que con vuestro apoyo, trabajo, colaboración  y ayuda hacéis que este proyecto sea real, y que los beneficiarios de este Proyecto Tessaout sean cada año más numerosos.



jueves, 3 de julio de 2014

El agua caliente cada vez más cerca de las casas de Ifoulou

Una nación no debe juzgarse por cómo trata a sus ciudadanos con mejor posición, sino por cómo trata a los que tienen poco o nada. Nelson Mandela

Los que vivimos aquí, en esta parte que llaman Primer Mundo, con tan solo girar la palanca del grifo hacia la derecha o la izquierda obtenemos agua potable a la temperatura deseada. La experiencia que compartí la pasada Semana Santa en el campo de trabajo que desarrolló aG en el Valle del Tessaout, en el seno de un espectacular escenario, el alto Atlas marroquí, me brindó la oportunidad de conocer de primera a mano el día a día de los habitantes de la zona, y pude tomar conciencia de cómo este sencillo gesto suponía allí un arduo trabajo. Lo que para nosotros es un cómodo ejercicio de apenas unos segundos, para las mujeres del valle se traducía en una tarea mucho más complicada y severa.  
Para conseguir agua las mujeres tenían que subir desde el río hasta sus casas con grandes y pesados bidones de plástico a sus espaldas. Curvaban sus cuerpos formando un ángulo de prácticamente 90º y los sostenían tirando con una sola mano de una cuerda atada al envase. La velocidad con la que “trepaban” el valle, de barro, de piedra, totalmente irregular, con calzados muy deteriorados que dejaban sus pies al descubierto, era impactante. Para conseguir calentar esa agua habían de cargar, del mismo modo, troncos de leña con los que hacer fuego. En este caso no bajaban al río, sino que ascendían, de una forma aún más temeraria, por altos riscos de donde obtenían la leña. Me gustaría mostrar una imagen. No lo hago por respeto a las mujeres del valle. Ellas piden que no se las fotografíe, siguiendo la instrucción de sus maridos desde el momento en que se prometen. 
Fer, conocedor de este escenario, tiene una idea: elaborar un panel térmico-solar con el que calentar agua y colocarlo en el tejado de la casa de su gran amigo Abdullah. Abdullah es el promotor de salud de la aldea de Ifoulou y sabe que, si este piloto da buen resultado, él se encargará de explicárselo a los hombres del pueblo para que todas las casas puedan calentar agua.
Con este plan en mente, unas semanas antes del campo de trabajo, diseñamos la placa térmico-solar: buscamos vídeos y documentos en internet en los que se muestran experiencias similares; analizamos qué materiales pueden ser más eficaces, siempre teniendo en cuenta que han de ser asequibles y accesibles para la gente del valle; hacemos una cuantas cuentas y buscamos un termómetro con el que tomar medidas. 

Una vez en Demnate, compramos el material necesario y lo transportamos hasta el valle, y con ayuda de nuestras compañeras del campo de trabajo, a la casa de Abdullah, en Ifoulou.






Allí nos reciben su mujer, Fatma, y su hija mayor, Fahima, muy hospitalarias, como la gente del valle acostumbra a ser con sus visitas. Nos invitan a que nos sentemos en una salita en la que nos preparan té y nos ofrecen pastas.


Fahima, que nunca pierde la sonrisa, se muestra expectante. A juzgar por su cara de sorpresa, estoy segura de que se pregunta qué hemos ido a hacer a su casa. Con ayuda de nuestro amigo e intérprete Hafid, se lo explicamos. Vamos a intentar que su casa tenga agua caliente. De pronto, un brillo que habla por sí solo inunda sus ojos. Ella lo acompaña de una exclamación: “¿¿De verdad??”. Y yo siento un vuelquecito por dentro con el que termino de comprender el sentido de nuestra visita al valle. 


Más tarde nos acompañan, a través de una escalera muy angosta por la que a mí me cuesta subir pero por la que ellas suben con total destreza cargando leña a sus espaldas, al tejado de la primera planta. Allí comenzamos a trabajar en el panel térmico-solar. La vista es increíble. A nuestros pies tenemos el río Tessaout, y debemos tener cuidado de no poner un pie fuera del tejado y caer al vacío.

En primer lugar, medimos y cortamos las tablas de madera para formar la base y los laterales del panel, que unimos mediante clavos. Fahima y su hermano menor, Nordin, observan lo que hacemos. Fieles aprendices, nos ayudan por iniciativa propia. 








A continuación, con ayuda de Rosa, aplicamos cola en las uniones de las tablas, para evitar que el calor se escape,  
y pintamos toda la superficie de color negro, con objeto de facilitar la absorción de la energía. Una vez seca la pintura, grapamos un plástico en la base del panel para retener el calor en su interior lo máximo posible. Seguidamente, Lucía nos ayuda a colocar un tubo de PVC en forma de espiral dentro de la estructura, para lo cual hacemos orificios sobre la madera con un taladro e introducimos trozos de alambre que hacen de sujeción.

Por último, grapamos un plástico en forma de tapa en los laterales del panel, para provocar el efecto invernadero. Hubiera sido más eficaz colocar un cristal, pero este recurso es más costoso.  

Tras varios días en que compaginamos el trabajo en el panel con otras actividades, éste ya está terminado. Con ayuda de Jorge lo subimos al tejado de la segunda planta, donde introducimos agua en el tubo con una tetera.


Después de varias horas al sol, medimos la temperatura que éste alcanza. El resultado es positivo. Pero es necesario que llegue el agua a casa de Abdullah para poder comprobar que el líquido fluye a través del panel. Éste necesita conectarse a una fuente con cierta presión para que funcione 








A lo largo del campo, aG trabaja junto con los hombres del pueblo para que el agua del pozo de Ifoulou sea bombeada hasta el depósito situado en altura, y de allí a todo la aldea, apoyándose en un generador eléctrico que llevamos al valle desde Madrid. Este logro, que describo rápidamente, marcará un antes y un después en la aldea, ya que tras nuestra marcha, empezarán a introducir el agua en las casas, con el inminente beneficio en la salud de las mujeres de Ifoulou y mejora de la calidad de vida de todos sus habitantes. Las mujeres ya no tendrán que subir del río cargadas con agua a sus espaldas y todos los habitantes dispondrán de agua corriente en casa para su higiene.


El día en que finaliza el campo de trabajo y hemos de dejar Ifoulou, el agua todavía no ha llegado a las casas del pueblo. Así que, con ayuda de Abdu, miembro de aG que colabora desde Marruecos, explicamos a Abdullah lo que debe hacer para conectar el panel al grifo, cuando ya dispongan de agua en casa. En aquel momento, todos pensamos: “Ójala esto suceda pronto”…. hoy día, esto ya es una realidad, sucedió dos semanas después de nuestra vuelta a Madrid. 
La semana pasada Abdu llamó por teléfono a Abdullah y le preguntó  si el panel térmico estaba dando resultado. Éste contesto que el agua se calienta lo suficiente como para poder preparar té y darse una ducha. ¿¿De verdad?? 

Por un lado, no pude evitar emocionarme al conocer esto. Por otro, sabemos que las personas del valle son agradecidas, tanto como para darnos una noticia que mantenga nuestra ilusión viva. Hasta que alguno de nosotros pueda viajar al valle para comprobarlo, me ilusiono pensando que Fahima y sus hermanos ya pueden ducharse con agua caliente, y que ella ya no tiene que cargar leña a sus espaldas.  Si no es así, “Ójala esto suceda pronto”…

Sonia Pérez-Vázquez
Voluntaria de aG durante el campo de trabajo 2014 en el Valle  del Tessaout.



Nota: A día de hoy, el agua corriente llega ya a todas las casas de Ifoulou.
Nota: Esta semana o la próxima, un miembro de aG visitará el valle, y comprobará personalmente el funcionamiento de este experimiento solar de Agua Caliente.